Fortaleza en la tranquilidad
"En confianza será vuestra fortaleza" (Isaías 30:15) | Lectura: Éxodo 14:10-14
Poco
después de aceptar a Cristo como mi Salvador, el compromiso que
demandaba esta decisión me hacía dudar de si podría pasar un año sin
volver a mis antiguos hábitos de pecado. Sin embargo, este versículo de
las Escrituras me ayudó: «El Señor peleará
por vosotros, y vosotros estaréis tranquilos» (Éxodo 14:14). Moisés
pronunció estas palabras ante los desanimados y temerosos israelitas
cuando acababan de huir de la esclavitud en Egipto y Faraón los
perseguía.
De
joven, con mi mundo rodeado de tentaciones, este llamado a «estar
tranquilo» me animó. Ahora, 37 años después, permanecer tranquilo y
calmado mientras confío en el Señor en medio de situaciones estresantes,
ha sido el deseo constante para mi vida cristiana.
«Estad
quietos, y conoced que yo soy Dios», declaró el salmista (Salmo 46:10).
Cuando nos tranquilizamos, conocemos más al Señor, el cual «es
nuestro amparo y fortaleza, nuestro pronto auxilio en las tribulaciones»
(v. 1). Reconocemos que, sin Dios, somos débiles y que debemos
someternos a Él. «Cuando soy débil, entonces soy fuerte», afirmó el apóstol Pablo (2 Corintios 12:10).
Cada
día, enfrentamos situaciones tensas y frustrantes, pero podemos confiar
en que el Señor cumplirá su promesa de cuidarnos. Aprendamos a estar
tranquilos.
El Señor puede calmar tus tormentas; pero, más a menudo, te calma a ti.
DIOS BENDIGA TU VIDA CON GRACIA Y PAZ
Pr. DOLREICH ARTIGAS
No hay comentarios.:
Publicar un comentario